Todo se gasta, todo se apaga y termina por ser un recuerdo a estrenar. Se acabó la luz en tu mirada, esas locas ganas que solías tener de verme, de sorprender a mi hoy agonizante espíritu. Tu mirada cristalina se desvanece, me alimento de recuerdos que me den la fuerza para ser capaz de olvidarte poco a poco. Acepto resignadamente tu ausencia, tu frialdad; es tiempo de partir, preparo las maletas y tu ni cuenta te das que me sacaste de tu vida.
Me prometo retirarme dignamente, tristemente, estúpida y dolorosamente, sin poder hacer nada más que agachar la mirada y ocultar un rostro despojado de vida. Te miro, sonrío, te digo que te amo por vez última y me parecen segundos eternos, la brisa despeina tu negro cabello largo, lo acomodo con mi mano mientras me despido de ti en silencio, solo así, tal como comenzó todo, de frente, viéndote a los ojos y a punto de estallar del éxtasis que aún me sigue provocando el verte, me encuentro así... amándote como desde el primer momento , jurándome que eres el amor de mi vida, promesa inconclusa...
Me sonríes y el corazón se detiene, me alejas de mis vagos pensamientos
- Hasta mañana, dicen tus pequeños labios.
Un nudo en la garganta no me permite contestarte y solamente logro acentar con la cabeza, te vas caminando y pareciera que no te alejas, que no lo harás nunca, definitivamente no sabes que estás a punto de perderme para siempre.
- Es hora de irnos
me dice aquella que estaba junto a mi y tu nisiquiera notaste, esa que durante los últimos días me acompaño tentadoramente, seductoramente.
Tomo su mano y se consuma la traición más grande que he cometido en tu contra, rompo en un instante todos los juramentos que alguna vez existieron entre nosotras y simplemente acepto que no hay marcha atrás. He tomado una decisión.
Minutos después mientras caminas desconcertada por mi extraño comportamiento, al cual la única razón que le atribuyes es tu torpe olvido del quinto aniversario y esa distracción causada por problemas familiares que te ha estado atormentando recientemente, tu celular te sorprende y tu rasposa voz contesta.
- ¿Pau?
... y es entonces cuando comprendo que siempre fuí el primer pensamiento que asaltaba tu mente, que siempre fuí la primera, la única, la dueña de ti.
Una voz desconocida te inquieta al otro lado del teléfono
- Señorita """"" , encontramos el cuerpo de una mujer que en su mano derecha tenía una pulsera con este nombre y este teléfono grabados. Necesitamos que venga a reconocer el cuerpo ya que no portaba ninguna identificación -mmm .. ella se suicido.
Tus ojos parecen quebrarse como dos bombas atómicas que despedazan cada parte de tu cuerpo. Me convierto en tu asesina... presa estúpida de la depresión.
El deseo se apaga una vez que éste cumple su fin de apropiarse del objeto del deseo.... en ese instante ya no deseaba irme lejos, desaparecer para siempre, fugarme del mundo, morir... lo apague... me aferre tanto a el que lo volví una realidad, nace un nuevo pensamiento en mi mente : lo único que deseaba ahora era regresar.
¿Que deseamos en realidad?