Para mis niños

Luce todo tan callado..... gris es la tarde y me encuentro de repente con tus ojos, inocencia pura derramando entre sonrisas sueños aún no engendrados.

Esperanza deberían de llamarte: niñez hermosa.

Subes entre brincos, carcajadas y tropezones la escalera que aún desconoces estar pisando y que se llama vida, son tus palabras llenas de verdades y franqueza las que me recuerdan de que color es la honestidad en este cuadro que pintas, así, con las manos manchadas y llenas de pintura sin temor a ensuciar la ropa limpia, sin temor a destruir lo material, que aún no logras concebir como la banalidad tan "importante" que en el futuro la sociedad te demostrará que es en nuestros tiempos.

Sigue así .. llenándote de tierra, mojandote la cara de sudor, raspándote las rodillas al caerte, porque al correr has de saber que ya lo has intentado, continua levantándote con ese entusiasmo que hoy lo haces, así como si no fuese una tragedia el haber caido sino un mal paso entre las piedras.

No dejes de ser así, blancura de pensamientos, milagro abrazando cuando las emociones te indican que quieres hacerlo, regalándo besitos y afecto sin temor al rechazo o estúpidos complejos.

Tu alma aún es un cristal tan limpio que parece un diamante, hoy eres el reflejo de la vida misma y el sentido que esta cobra con el paso del tiempo. Iluminas tanto los días (sin darte cuenta) con destellos tan brillantes, que las nubes negras y ese tono melancólico en el que a veces esta llamada "adultez" trae consigo, se convierten en arcoiris inmensos que inyectan esas ganas de vivir que hoy me enseñas a no perder jamás...

Ayy... me enamoré de los niños :)